Lugares privilegiados
Ayer(sábado)estuve con Fany y Néstor en el mirador de San Nicolás.
Estuvimos allí sentaditos en el muro,mirando hacia la Alhambra,comiendo patatas y pipas y charlando.Hacía una temperatura agradable y las vistas no podían ser mejores.
Y allí,me di cuenta,que el mirador de San Nicolás es uno de los lugares más especiales que hay en el mundo,que seguro que pocos sitios hay como ese y me sentí afortunada de poder disfrutarlo.
Decidí que tenía que volver más veces antes de que acabe el verano,porque en invierno no se puede estar allí por la noche,del frío que hace,el Albaicín tiene un microclima diferenciado del resto de la ciudad.El caso es,que tengo que volver,porque un lugar así,merece la pena disfrutarlo y volver todas las veces posibles y maravillarse siempre que aparezca una vista tan increíble y preciosa.
También me sentí feliz,en este verano extraño y horriblemente caluroso,aunque siempre,con el punto un poco amargo de no poder disfrutar momentos como esos con gente a la que quiero muchísimo y en la que pensaba constantemente.
La foto,Fany y yo y las preciosas vistas de la Alhambra.
2 comentarios
David -
Fany -